Especial Memoria Democrática

Apenas queda rastro en Madrid de lo que fueron los centros de detención y tortura del franquismo. La demolición en 2008 de la cárcel de Carabanchel, símbolo de la resistencia frente a la dictadura, fue un acto contra la memoria. Diversos colectivos ciudadanos organizados en una Plataforma reivindican que en los terrenos que ocupaba la prisión se reserve un espacio para un memorial donde se explique y documente la implacable represión que desplegó el régimen de Franco para intentar doblegar a la oposición política, sindical y estudiantil. Nicolás Sartorius, uno de los fundadores de CCOO, y Begoña San José, primera secretaria de la Mujer del sindicato, rememoran para Madrid Sindical sus cumplimientos de condena en la penitenciaría madrileña durante los años 60 y 70 y la lucha que hizo posible la democracia. 

Cárcel de Carabanchel, antes de su derribo en 2008

Memoria necesaria

Artículo de opinión de Paloma López, secretaria general de CCOO Madrid